Así van las cosas...

Me parece increible lo manipulador que puedes llegar a ser en algunos momentos,
como te ries de todo el mundo y haces que vayan por el camino que tu mas deseas
en algunos momentos contigo me siento fuera de lugar
pienso que te olvidas de mi como si de un mal recuerdo se tratase
hulles de los problemas, hasta que no puedes mas
con un colocón te vale para sentirte bien contigo mismo
pero llegara el momento que no puedas estar colocado y todo volverá...
una gran bola de mierda se aproxima hacia tí
pero tu corres y te refugias en tus amigos que, como ya tienen de todo,
solo buscan lo que todos los demás, ese momento de bienestar,
que mas tarde se convierte en la peor sensacion del dia
tan parecida a la mia mira ya nos vamos pareciendo en algo
todo va viento en popa!! pues no, nada mas lejos...

Tiempo perdido en los bares

Según la R.A.E. un bar es un local en que se despachan bebidas que suelen tomarse de pie, ante el mostrador.

Pero para mí es mucho más que eso, buena parte de mi vida la he pasado en estos lugares y ahora quiero dedicarles unas líneas a los bares que marcaron mi vida, como………

… el Master Rock que albergó mis primeras borracheras, mis primeros rollos a ciegas y ciego, y lo más importante el rock más oscuro en estado puro.

…como el Deltoya, donde descubrí las melenas, el alcohol en abundancia y las “buenas compañías” de las cuales me quedan dos o tres hoy en día.

…como el Velardes mi bar de fumadas, donde íbamos todos los viernes cuatro coleguitas del colegio y nos fumábamos en una tarde la paga de la semana.

…como el Blow donde descubrí las mejores cervezas que he probado y donde redescubrí el rap y las nieves de primavera con los kinkis de mi barrio.

…como el Zero o La Novena donde he cogido los ciegos más raros de mi vida y he bailado lo inbailable en un estado no menos lamentable.

…o como el Carcasonne donde toda mi generación iba a emborracharse en sus barras libres hasta perder el conocimiento.

…como en el Cercha donde nos bebíamos el matarratas que nos servían en vaso de chupitos para ganar algún regalo.

…o como el Testa donde el camarero speednómano me ponía esos refrescantes cachis de cerveza.

…como el Otro Trastero donde buena música y cerveza a precio medio me hizo llegar tarde a citas posteriores.

…como el Babel, al cual sólo asistí una vez, pero me bastó para darme cuenta de lo que tenía que hacer.

…como la Garota donde recibí buenos ratos y buenos palos junto con los colegas del barrio.

…como el bar del noruego en donde he pasado los mejores ratos de mi vida con mis tíos y primos.

…o como el pub Arlequín en donde algunas veces la diversión y otras el aburrimiento no tenían fin.

...como en el Davi´s que llegó a ser mi segunda casa durante mucho tiempo, y me abrió las puertas a el sexo en lugares públicos.


...como la casa del arte donde su inspiración me embriagó durante un corto periodo de tiempo.